Javier “Chicharito” Hernández Balcázar, de 37 años, puso fin a su segunda etapa con el Club Deportivo Guadalajara este jueves, en un comunicado oficial que resalta su legado como uno de los máximos referentes del fútbol mexicano, pero que llega envuelto en críticas por su bajo rendimiento, lesiones recurrentes y un penal fallido que simbolizó la eliminación en la Liguilla del Apertura 2025.
El Club Guadalajara emitió el anuncio el 11 de diciembre de 2025, destacando el vínculo eterno con Hernández, formado en las fuerzas básicas del Rebaño Sagrado. “El vínculo entre ‘Chicharito’ y el club de sus amores, el que lo formó e impulsó para convertirse en un histórico de nuestro balompié, perdurará para siempre. Javier es, sin duda, uno de los máximos referentes del futbol mexicano. Con el Rebaño conquistó el título de Liga del Apertura 2006 y el de goleo individual del Bicentenario 2010, antes de emprender una carrera internacional que lo llevó a triunfar en varios de los clubes más importantes de Europa”, reza el mensaje oficial.
El comunicado también recordó que Hernández es el máximo goleador histórico de la Selección Mexicana con 52 goles, y que en su regreso a Chivas aportó experiencia y liderazgo para jóvenes como Armando González, actual campeón de goleo de la Liga MX con 12 tantos en el Apertura 2025. “El club agradece su entrega y pasión durante los casi 2 años de esta segunda etapa como rojiblanco y sabe que, en cada oportunidad, seguirá apoyando y demostrando el profundo amor que siente por la institución y sus colores. Javier, te deseamos el mayor de los éxitos en la ruta que emprendas de aquí en adelante”.
Su último desempeño y el penal fallido quedaron marcados por un episodio doloroso: el penal fallado ante Cruz Azul en el minuto 85 del partido de vuelta de cuartos de final el 29 de noviembre de 2025 en el Estadio Olímpico Universitario. Con el marcador global empatado 2-2 y la ventaja de local para la Máquina, el balón terminó en la pista de tartán, sellando la eliminación de Chivas y desatando una ola de críticas hacia el delantero, quien apenas disputó cinco partidos en el torneo, sumando 117 minutos y un gol. Ese error, cobrado en lugar del designado Luis Romo, fue la gota que colmó el vaso para la directiva, que decidió no renovar su contrato, que vence el 31 de diciembre de 2025.
En total, durante esta segunda etapa –que inició en enero de 2024–, Hernández anotó cuatro goles oficiales en 20 partidos, con frecuentes ausencias por lesiones musculares y de rodilla que lo limitaron a un rol más simbólico que futbolístico. Polémicas adicionales incluyeron videos fuera de la cancha donde se le vio en fiestas y declaraciones sobre su forma física, que generaron cuestionamientos de la afición y la prensa.
Fuentes cercanas al club, citadas por ESPN, indicaron que su salida era un hecho desde noviembre, priorizando una reestructuración para el Clausura 2026 bajo el DT Gabriel Milito.
Una relación que nació en Guadalajara se despide con nostalgia. Hernández debutó profesionalmente con Chivas en 2006, donde brilló con el título del Apertura 2006 –anotando 7 goles en el torneo– y el campeonato de goleo en el Bicentenario 2010 con 10 tantos, antes de emigrar al Manchester United, donde ganó la Premier League 2010-2011 y se consolidó como referente mexicano en Europa. Su trayectoria internacional incluyó pasos por Real Madrid (2014-2015), Bayer Leverkusen, West Ham United, Sevilla y LA Galaxy, además de tres Copas del Mundo con México (2010, 2014, 2018).
El adiós de un histórico deja un balance agridulce: un ídolo que regresó en busca de redención pero no pudo replicar su magia pasada. Mientras Chivas inicia pretemporada el 15 de diciembre con exámenes médicos y enfoque en canteranos como González, Hernández evalúa ofertas en la MLS o USL de Estados Unidos, según reportes de Marca México, sin planes de retiro inmediato. Su legado en el Rebaño –con 30 goles en su primera etapa– perdurará, pero esta salida subraya las exigencias implacables del fútbol moderno.
