Colima.- Para el director de Consultores en Administración y Políticas Públicas (CAPP), Abel Palomera Meza, el desequilibrio financiero en el Gobierno del Estado de Colima es más un problema de tipo político y de visión de gobierno, que de números y finanzas.
“El manejo del gasto y los límites que se impongan a éste tienen más que ver con la mentalidad del gobernante y su capacidad para controlarse y controlar a sus subordinados, que con su astucia financiera e inteligencia para hacer cálculos”.
Entrevistado por AFmedios el especialista propone cinco acciones concretas para recuperar el equilibrio financiero en el gobierno estatal:
- Reducir tamaño de la administración pública. En el gobierno estatal sobra tamaño y complejidad, lo que equivale a una burocracia excesivamente costosa y lenta. Contar con propósitos, funciones y procedimientos claros, a la par de tener a los mejores profesionales, lleva a una administración pública más eficiente y funcional. La reducción del tamaño de la administración estatal debe ser de al menos el 30%, lo que significa suprimir un puesto de cada tres que existan en un área.
- Equiparar sueldos del sector público con los del sector privado. Además de que hay demasiado personal, los empleados públicos tienen sueldos ridículamente altos, lo que crea una “brecha salarial” entre el sector público y el privado. Aunado a que se trata de una situación que genera profundas desigualdades sociales y económicas en la sociedad colimense, es una condición evidente de ineficiencia financiera, y no existe razón alguna para que gane más un empleado público que uno privado, cuando ambos desempeñan las mismas funciones, tiene igual carga de trabajo, y están sujetos a responsabilidades.
- Fomentar la colaboración público-privada y público-social. Los costos del gobierno son altos en gran medida por cumplir todas sus funciones y actividades, sin el apoyo ni la participación de la sociedad. Es claro que el gobierno no ha sido capaz de ser competitivo en el logro de los fines públicos, y ha demostrado ineficacia en la solución de problemas como la pobreza y la inseguridad. Al mismo tiempo, el sector privado y las organizaciones de la sociedad civil han generado gran capacidad de respuesta y de obtener resultados, cuando las situaciones así lo han requerido. Las empresas y las organizaciones civiles tienen mucho por enseñar al gobierno estatal, y bastante por ayudarle a ahorrar a través de su colaboración conjunta.
- Autonomía en el gasto público de áreas esenciales. Una de las mayores causas del quebranto financiero que prevalece, es el considerar que el Presupuesto de Egresos es una gran bolsa donde todos los recursos son iguales y a la que puede meterse mano como se desee, llevando dinero de un lado a otro sin considerar las consecuencias. La realidad es que hay áreas esenciales como el poder legislativo, el poder judicial, el ámbito educativo, el sector salud, y el área de seguridad pública, que deben tener autonomía en el manejo de los recursos, alejando de ellos las manos del Gobernador y del Secretario de Finanzas. Es decir, el recurso que se planeó para salud, educación, y los mencionados, es sólo para usarse en ese fin, y para ningún otro.
- No Más Deuda en estado y municipios y Plan de Pago de Deuda actual. El gobierno estatal tiene un hoyo financiero no solamente por su deuda pública de corto y largo plazo, sino también por convertirse frecuentemente en obligado solidario de los problemas financieros de los Ayuntamientos. Esta es una costumbre política que debe terminar. Los municipios no solamente deben ya no solicitar recursos fuera de la ley, al ejecutivo estatal, sino hacerse responsables de su propia situación financiera. Esto significa sanear su gasto público, no contratar más deuda y establecer un Plan de Pago de la Deuda actual. Estas recomendaciones aplican igual al Gobierno del Estado.
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Y, que piensan hacer con tanto desempleado???