La actividad sísmica y fumarólica ha tenido un ligero incremento en las últimas semanas, aunque continúa en una etapa de desgasificación pasiva el volcán; así se estableció en el reporte semanal del Centro Universitario de Estudios e Investigaciones de Vulcanología, de la Universidad de Colima.
Se mencionó que el personal encargado del monitoreo del volcán se mantiene atento a los cambios y a la evolución de la actividad.
En la última semana, de l 13 al 19 de abril se contabilizaron de forma automática 28 eventos de alta frecuencia (HFs), 10 eventos de largo periodo (LPs), 0.49 hrs de tremor, 13 derrumbes y 3 eventos considerados como explosiones de baja intensidad.
En el periodo reportado no se detectó algún fenómeno asociado a la actividad volcánica (incandescencia, explosiones con ceniza, flujos piroclásticos y/o derrumbes).
Únicamente fue posible observar durante algunos lapsos de tiempo una emisión débil de vapor.
Se realizó un vuelo de observación el sábado 14 de abril, comparando las imágenes con el último vuelo de enero, no se observaron diferencias significativas en la morfología del cráter.
Las fumarolas más vigorosas y con una mayor temperatura están en la pared este del cráter. Se mostraron temperaturas ligeramente más altas que en el último vuelo, en algunas zonas como en el piso del cráter (219° C; temperatura aparente), fumarolas este y fumarolas noroeste.
Se realizaron varias mediciones del flujo de SO2 (óxido de azufre) el viernes 13 de abril con un promedio de 3.3 kg/s, también se observaron algunos pulsos de gas.
El miércoles 18 de abril también se midió y se tuvieron valores abajo del nivel de detección (~0.1 kg/s), sin observarse pulsos.
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