La información ha dejado de estar impresa en papeles para aparecer en formato digital, lo que obliga a los estudiosos de las telecomunicaciones a encontrar las formas de protegerla y ofrecer los servicios que permitan acceder a ella o modificarla sin poner en riesgo la privacidad.
Así lo dio a conocer el académico cubano del Instituto Superior Politécnico “José Antonio Echevarría” en La Habana, Walter Baluja, quien asistió al XIII Simposio Internacional de Telemática en la Universidad de Colima.
En días pasados, Baluja, experto de la seguridad en redes inalámbricas, explicó que esta característica es un derecho de las instituciones porque cada vez dependen más de soportes de informatización para cumplir su objetivo social, y también de los usuarios, para que éstos efectúen arreglos a servicios sin que se conozcan detalles sobre su persona que puedan ser utilizados negativamente.
El investigador cubano, acompañado de la directora del Comité Científico de Informática, Caridad Anías Calderón, quien también participó como conferencista en el simposio, visitaron la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME) para valorar su plan de estudios, instalaciones y líneas de investigación. “Tenemos interés en hacer intercambio de profesores, de estudiantes, cooperación con proyectos y, si es factible, colaborar en la reestructuración del plan de estudios”, explicó Baluja.
Para el experto en seguridad de redes, este tema ya no es nuevo pero sí ha evolucionado, pues ya no se usan soluciones puntuales sino más bien sistemas de gestión integral. Ahora los servicios son mucho más avanzados, entre ellos, dijo, la ubicuidad, el acceso inalámbrico, la variedad de usuarios, pero en cada momento aparecen nuevos retos para mantener niveles de seguridad aceptables.
A los estudiantes, Walter les pidió aprovechar las oportunidades que tienen para capacitarse, como el simposio de Telemática, por ser ocasiones para actualizarse tecnológicamente en información, establecer contactos con conferencistas y talleristas.
Además, los invitó a su casa de estudios (también conocida como Universidad Tecnológica de La Habana) donde tienen las puertas abiertas para cualquier colaboración, finalizó.
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