Colima.- La situación de la comunidad indígena de Zacualpan sigue sin resolverse: los dos grupos que se han vuelto antagónicos mantienen dos campamentos en la lucha por el control del balneario Ojo de Agua.
El grupo del presidente de Bienes Comunales, Taurino Rincón Lorenzo, está dentro del balneario, exigiendo la administración del Ojo de Agua, y cuentas del encargado anterior.
Por otra parte, el grupo que exige determinar mediante asamblea la administración del balneario, asegura que hay irregularidades en la forma de conducirse de Rincón Lorenzo, y su campamento está en la brecha que lleva al Ojo de Agua.
Ambos grupos, numerosos los dos, aseguran que no retirarán sus bloqueos hasta que los otros lo hagan y se resuelva de fondo la situación que ha dividido a la comunidad indígena.
Buscando derecho de réplica por los comunicados que han sido enviados por el Comité Indígena por la Defensa del Territorio de Zacualpan (CIDTZ), un grupo de comuneros se acercaron a AFmedios para explicar las que consideran son irregularidades de la nueva dirigencia indígena.
Faustino Santos Laureano, anterior administrador del balneario, señaló que el sello de la asamblea del 28 de diciembre, donde se aprobó que Taurino Rincón tomara posesión del Ojo de Agua, no está registrado ante el Registro Agrario Nacional (RAN), y por lo tanto es irregular.
“Esta acta viene plagada de irregularidades y no estamos de acuerdo porque ellos están recibiendo orientaciones absurdas de Bios Iguana”.
En ese sentido, Guadalupe Laureano aseguró que la asamblea que eligió a Rincón Lorenzo también es ilegal, pues ‘inflaron’ el padrón de comuneros, por lo que piden que haya nuevas elecciones.
“Están intentando darle otro rumbo a nuestro régimen ejidal, queremos que haya una buena administración, según los estatutos que nos rigen”.
Además, Guadalupe Laureno negó que no se permita el paso de víveres hacia el campamento ubicado en el balneario.
“No están secuestrados, entran y salen por donde quiera, hay caminos libres”.
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