16 muertos tras enfrentamientos en Zihuatanejo entre autoridades y civiles

Guerrero /Cuauhtémoc Albarrán.- Al menos 16 muertos se han contabilizado como saldo de enfrentamientos entre policías estatales, ministeriales, marinos y militares en contra de civiles armados en distintos puntos de Zihuatanejo, Guerrero.

Alrededor de las 18:00 horas del martes, se emitió un reporte policiaco sobre un primer enfrentamiento en la localidad de La Quebradora, del ejido de El Coacoyul, con saldo de tres civiles abatidos.

Roberto Álvarez Heredia, vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, confirmó los hechos mediante una llamada telefónica.

El funcionario indicó que el enfrentamiento ocurrió cuando policías del estado realizaban un recorrido de vigilancia por esa zona, y notaron la presencia de varios civiles a quienes marcaron el alto, sin embargo estos dispararon en respuesta con armas de grueso calibre.

Los elementos policiacos repelieron el ataque y los presuntos delincuentes emprendieron la huida.

Marinos, militares y agentes de la Policía Ministerial acudieron como refuerzo de los estatales, siguieron a los civiles hasta unos árboles y matorrales, donde se generó una segunda balacera en la que fallecieron siete civiles.

Posteriormente acudieron agentes del Ministerio Público y peritos de la Fiscalía Regional para llevar a cabo las diligencias de ley y contabilizaron diez cadáveres.

Los peritos localizaron decenas de casquillos percutidos de armas accionadas por rifles AK-47 y AR-15, usadas por los civiles fallecidos.

Como resultado de los enfrentamientos se informó que un policía ministerial resultó herido en una pierna y fue trasladado a un hospital de la zona.

El vocero de seguridad informó que, a las 19:00 horas, casi simultáneamente, una patrulla de policías estatales fue emboscada en las inmediaciones de la comunidad de El Camalote donde resultaron muertos seis uniformados.

Estos policías regresaban a la ciudad tras prestar un servicio a personas que cuentan con medidas cautelares, cuando fueron atacados.

El funcionario no descartó que este ataque haya sido una cruenta reacción de un grupo delictivo por los hechos ocurridos antes en el Coacoyul.

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