SUCEDÁNEOS

¿QUÉ VIENE?
Por: Sean Osmin HAMUD RUIZ

Conscientes de que abierta está la competencia política, ser objeto de crítica no debe ni sorprender ni molestar, mucho menos incomodar, sino todo lo contrario.

Motivar observaciones o señalamientos está directamente conectado con el hecho de que se es sujeto de interés. No nos molestamos en criticar lo que no nos interesa.

Las valoraciones pueden ir en sentido constructivo o denostativo, pero su origen, -no se puede negar-, proviene de esa condición de algo “importante” para cada uno.

Conviniendo esto, ahora lo interesante es identificar el objeto de estos análisis. ¿Las perspicacias van sobre actuaciones u omisiones?

No es ocioso saberlo. Hacer cosas siempre va a llevar el riesgo de que puedan o no funcionar, puedan o no gustar, puedan o no impactar.

Muy diferente situación es cuando la calificación negativa por la inacción, el ostracismo o de plano por el error evidente.

Por supuesto que es indispensable prestar oídos y atención a estos dichos, sean en el sentido y por la motivación que sea. Crecer requiere de poder ir aprendiendo, siempre que el objetivo tenga que ver con corregir.

Que si son muchos festivales, que si las podas a los árboles son buenas o malas, que si se está infraccionando por exceso de velocidad. Todos puntos sensibles y que ofrecen áreas de oportunidad, y que la ciudadanía con su particular filtro y comentario van evaluando, inclusive ofreciendo perspectivas para  que todas estas acciones tengan un mejor impacto. Sintetizando: hay interés en conocer qué está haciendo la administración del presidente municipal Riult Rivera.

Más allá de quien realizó las llamadas telefónicas y cuál era su finalidad, lo que es claro es que su administración es observada con atención desde la perspectiva ciudadana. Asimismo,  la expectativa respecto a su desempeño es alta, porque se piensa que sí puede.

Ahí es donde el esfuerzo debe concentrarse pues ya no estamos para recibir SUCEDÁNEOS.

 

MICROCUENTO

Comenzó el día del padre. No hay regalito (me comentan que viene retrasado), no hay desayuno sorpresa (que mejor escoja a dónde ir a comer); sí hay un par de repisas que poner, un pasto que podar, un montón de mascotas que atender (perros, tortuga, pez beta) y, lo más importante, un abrazo grupal que me llegó a la cama lleno de besos, felicitaciones y amor de mis dos chilpayates