Chiapas.- Este lunes, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, puso en marcha la Cruzada Nacional Contra El Hambre en el estado de Chiapas donde, aseguró, “resulta lastimoso, lamentable y doloroso que aún sigan existiendo mexicanos que padecen hambre, aquí y en todas las entidades del país”.
Dicho programa, que busca sumar esfuerzos a favor de quienes viven en esta condición, contempla cuatro ejes: Orientación focalizada: los esfuerzos se concentrarán en las localidades más críticas de 400 municipios con alta incidencia de pobreza extrema y carencia alimentaria.
Corresponsabilidad: va más allá de los programas de la Sedesol y contempla los esfuerzos de los sectores salud, educación, vivienda, economía, y servicios básicos, como agua, luz y drenaje. Para ello, Peña Nieto el Decreto por el que se establece el Sistema Nacional Contra el Hambre (SINHAMBRE). Además, considera reuniones con los gobiernos estatales para convenir las acciones prioritarias, asumiendo compromisos puntuales y concretos para evitar duplicidades.
Estrategia social que fortalece las capacidades productivas: quienes reciben un apoyo, en el futuro tendrán la capacidad de salir de la pobreza a partir del fortalecimiento de sus ingresos como individuos productivos.
Energía comunitaria y social: involucrará a los beneficiarios en las soluciones que se requieren.
Los indicadores de la Cruzada Nacional serán verificables pues estarán dentro del Sistema de Evaluación del Desempeño. Tanto ciudadanos como el propio Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) participarán activamente en la medición de los resultados.
Peña Nieto recalcó que “la gran protagonista de la Cruzada Nacional Contra el Hambre será la sociedad mexicana en movimiento. Superar el hambre es prioridad del Gobierno de la República y superar la pobreza extrema, la mayor obligación ética”.
La Cruzada Nacional Contra El Hambre atenderá, en primer orden, a los 7.4 millones de mexicanos que padecen la doble condición de pobreza extrema y carencia alimentaria severa.
“Esta cruzada no es una medida asistencialista. No se trata sólo de repartir alimentos. Es una estrategia integral de inclusión y bienestar social. Es un cambio estructural en materia de combate a la pobreza”, explicó Peña Nieto.
“Todo México gana, si hay menos pobreza. Todo México gana si más mexicanos se incorporan al desarrollo productivo de la nación”, aseguró el presidente.
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