Manzanillo.- El gobernador Ignacio Peralta Sánchez reiteró públicamente su compromiso por gestionar la salida de la Terminal de Pemex y otras instalaciones estratégicas de la zona centro de Manzanillo.
Esto permitiría recuperar espacios como el rompeolas; expuso que desde hace 10 años se ha buscado el desarrollo de la Laguna de Cuyutlán como sede de la industria de la ciudad para impedir que ésta coincida directamente con la Mancha poblacional.
Al respecto, el mandatario estatal recordó que en su gestión como secretario de Fomento Económico, desde el sexenio de Gustavo Vazquez, pugnó porque el crecimiento del recinto fiscalizado se diera hacia Cuyutlán y no a la zona norte como eventualmente ocurrió.
Indicó que en caso de que se hubiera optado por la primer propuesta no se hubiera requerido de la construcción del túnel ferroviario y por ende las severas afectaciones que éste ha propiciado no se hubieran presentado.
«Desde la Sefome planteamos una batalla para que el puerto no creciera en la zona norte más aún porque sabíamos ya que por La laguna -de Cuyutlán- se iba a habilitar la regasificadora y propusimos que el canal de esa terminal supusiera la base allá de la nueva terminal de contenedores; con eso hubiéramos descongestionado la parte urbana puesto que hubieran existido menos ventanas del ferrocarril y también menos carga… lamentablemente esa batalla se perdió, dejándose pasar en aquella oportunidad de comenzar a mover, con mucha antelación, el puerto a Cuyutlán», apuntó.
Explicó que tal decisión implicó dificultar la convivencia puerto-ciudad puesto que se vio la necesidad de ampliar el tendido férreo, confinado, hacia Las Brisas así como construir pasos a desnivel en el Valle de Las Garzas, construir una nueva aduana y afrontar muchos otros problemas operativos.
«Por ejemplo todavía no se sabe cómo conectar la nueva terminal de zona norte con las anteriores instalaciones», terminó.
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