El Informe Mundial sobre Drogas advierte sobre un incremento alarmante en la producción y consumo de drogas en el mundo. Además, destaca cómo las desigualdades agravan el impacto negativo de las adicciones.

En la última década, el número de consumidores de estupefacientes ha experimentado un aumento significativo del 23%. Actualmente, se estima que 296 millones de personas -lo que equivale al 5,8% de la población global de entre 15 y 64 años-, consumen este tipo de sustancias.

También se visto un incremento del 17,5% en las muertes relacionadas con las drogas entre los años 2009 y 2019, alcanzando la cifra de aproximadamente 500 mil fallecimientos. Las principales causas de mortalidad son la hepatitis C y las sobredosis. Entre las drogas más letales se encuentran los opioides, como la heroína y el fentanilo.

Por otro lado, el cannabis sigue siendo la droga más utilizada, con aproximadamente 219 millones de consumidores, seguido de los opioides, las anfetaminas, la cocaína y los estimulantes conocidos como «éxtasis».

La producción de cocaína alcanzó un récord histórico en el año 2021, y la demanda también está en su punto más alto.

El informe destaca el rápido y drástico cambio que están experimentando los mercados ilegales de drogas debido al creciente predominio de las drogas sintéticas. La fabricación de estas sustancias es económica, fácil y rápida. Uno de los ejemplos más preocupantes es el fentanilo, un poderoso opioide sintético.

En el año 2021, se registraron casi 90 mil muertes por sobredosis de opioides en América del Norte, la mayoría de ellas relacionadas con fentanilos fabricados ilegalmente.