Colima ha vivido en los últimos días un clima de inseguridad que se ha recrudecido por una serie de hechos delictivos, registrados a partir del 7 de febrero, generando hasta la fecha un saldo de 22 muertos y dos bolsas negras con restos humanos, de acuerdo a lo comunicado por la Fiscalía General del Estado.
La riña en el Centro de Reinserción Social de Colima, donde fallecieron 9 personas y 7 quedaron lesionadas, la mayoría por arma de fuego, fue de alguna manera el parteaguas que dio pie a los hechos violentos que se han registrado principalmente en la zona conurbada de Colima y Villa de Álvarez, pero que también ha alcanzado otros municipios como Tecomán y Manzanillo.
Ante esto y como respuesta, las autoridades entre otras acciones, han establecido Puestos Militares de Seguridad en las principales salidas e ingresos del área conurbada de Colima y Villa de Álvarez, para aplicar revisiones a los vehículos de acuerdo a un protocolo establecido, en el que, entre otras cosas, se aplica lo que marca la Ley Federal de Armas de Fuego Y Explosivos (México), que permite la portación de ciertos calibres, en ciertos espacios con el permiso respectivo.
Estos puestos están resguardados por personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y son elementos de la Guardia Nacional y Policía Municipal, los encargados de marcar el alto y hacer la revisión tanto de los documentos de las personas y los vehículos, así como la verificación para cerciorarse de que no transporten algún artículo ilegal, como pueden ser armas o sustancias.
Personal de la Sedena también están participando en reconocimientos que se llevan a cabo en las principales colonias que tienen perfiladas como conflictivas, actividad que se realiza en diferentes horarios, con el objetivo de no alertar y garantizar la seguridad de la población.
Derechos Reservados AF
