Jalisco.- La pandemia del COVID-19 y las restricciones que ello ha impuesto han provocado un impacto económico incalculable a la industria turística de la Costalegre, en Jalisco, declaró Alfonso Espinoza Estrada, delegado regional de turismo en dicha jurisdicción.

Entrevistado al respecto, el funcionario estatal sostuvo que el turismo es una actividad preponderante en esta zona y la baja afluencia, derivado de medidas como cierre de playas y destinos, ha repercutido severamente en el sector.

No obstante, Espinoza Estrada consideró que ante la gravedad de la situación estas medidas han sido necesarias para procurar la integridad física de la población, así como de los trabajadores del ramo y sus clientes.

Por lo anterior insistió que la actividad se ha visto restringida al máximo, aunque confía en que en un mediano o largo plazo la situación vuelva a la normalidad.

“Porque insisto primero la salud de todos”.

El delegado regional de Turismo en la Costalegre comentó que en esta zona existen poco más de 160 hoteles de diferentes categorías y capacidades.

Cabe recordar que dicha localidad se preparaba para afrontar no solo el periodo vacacional de Semana Santa y Pascua, de alta afluencia de vacacionistas, sino también la parte final de la temporada de invierno donde se concentra un mayor número de visitantes internacionales.

Se estima que la oferta hotelera en esa región supera los 3 mil cuartos.

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