ESCOLLERA / La renovación en la Unión de Estibadores, historia pura

Por Edgar Cazares

Los vientos de cambio han llegado ya también a la Unión de Estibadores y Jornaleros del Pacífico (UEJP)-CROM, ni más ni menos una de las organizaciones sindicales más importantes del país, luego de que sus más de 700 afiliados, luego de que tras más de 40 años de la era Cecilio Lepe Bautista –quien falleció el pasado mes de julio- fuera electo en forma indiscutible, Gustavo Larios.

El mencionado es un personaje con reconocimiento en el ambiente portuario y gozaba de las simpatías de una parte importante del gremio por lo que no nos extraña su nombramiento.

Solo habrá que esperar ahora que no le falle al noble sector que es uno de los mejor remunerados y con más oportunidades del ámbito laboral en la localidad quienes venían buscando desde hace años renovación y sobre todo más oportunidades democráticas en la toma de decisiones.

Porque a pesar de las aptitudes y simpatía del nuevo secretario general de UEJP hay que recordar que no en todos los casos los cambios fueron para mejorar.

Él tiene la última palabra y en sus manos está consolidar esos anhelos de los estibadores que le dieron su voto de confianza para emprender esa apertura que se estaba dando en el país –con sus fallos y aciertos- desde mediados de los noventa y que en diferentes organizaciones sindicales había tardado en llegar. Lo que es un hecho es que hay una nueva era en la Unión de Estibadores. Esperemos que todos sus sueños, los positivos, se cristalicen.

*No hay que olvidar que Iván Lepe Vasconcelos, quien también contendió para estar al frente de la UEJP, sigue siendo líder de la Federación Mexicana de Trabajadores de Maniobras Marítimas y Terrestres de la República Mexicana.

Y lo que habría que destacar, además de ello, es que el hijo de Don Cecilio mostró, cuando menos en público, una postura respetuosa y conciliatoria tras conocerse los resultados ya citados. Porque las nuevas generaciones no lo vivieron pero en otros tiempos “los dueños del balón” no aceptaban resultados adversos: cuando perdían, arrebataban si la situación lo ameritaba.

Pero bueno, en estos días la cosa ha cambiado y me da la impresión de que muchos involucrados en la vida pública también han tratado de adaptarse, unos más y otros menos, a estos tiempos donde la democracia parece mostrar avances, lentos pero seguros, y donde las discusiones o polémicas son rechazados tajantemente por la población en general.

El caso es que es de reconocerse cómo se manejó Iván Lepe ante toda esta situación, mostrándose a la altura. Porque, insisto, sigue ostentando un cargo de relevancia en el entorno portuario.

*Y también viene al caso que no todo fue malo en la época de Don Cecilio Lepe al frente de las diferentes organizaciones portuarias que le tocó presidir.

Fue un manzanillense que estuvo en las altas esferas, estuvo presente en ciertas ocasiones en las grandes decisiones que tomaban los hombres del poder a nivel nacional y casi todos los presidentes, del antiguo y nuevo sistema, lo procuraron. Por algo será.

Ciertamente el paso del tiempo nos permitirá valorar en su justa dimensión el legado, innegable, del ya fallecido líder cromiano en cuya gestión la organización sindical de puertos alcanzó un esplendor que no se ha vuelto a repetir.

APUNTES DESDE LA COSTA

He pasado mucho tiempo de mi vida cerca del mar. Y por fortuna quienes me acompañaban en mis frecuentes idas a la playa invariablemente me aconsejaron mucha precaución al momento de ingresar a este.

No puedo mentir: en más de una ocasión hubo alguna situación que puso en riesgo mi vida o la de algún amigo en esas escapadas al mar.

Por ello lo digo con conocimiento de causa: sí se requiere crear una corporación estable de rescatistas en playa pero también se ocupa trabajar muchísimo en la conciencia de quienes visitan estos espacios. Gran parte de ellos, incluso sabiendo nadar, creen que la playa es como una gran alberca. Error. Eso ha costado vidas, especialmente entre turistas, entre quienes no saben nadar y también entre quienes han osado bajar la guardia.

El ejemplo se tiene muy a la mano en estos tiempos: las playas cerradas por la contingencia sanitaria por COVID-19 y día con día se observa como el número de bañistas va en aumento.

Sin duda alguna se debe aspirar a 2 cosas, reiteró, sí la contratación de más guardavidas completamente capacitados y en número suficiente pero al mismo tiempo emprender una campaña de concientización entre los visitantes de nuestros mares.

De no ser así las estadísticas negativas continuarán y eso es mala imagen para Manzanillo como destino. Gracias por el favor de su atención. Sus comentarios a edgar.cazares.afmedios@gmail.com