Ciudad de México.- De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) primer trimestre 2021, en México hay 2.2 millones de personas de 15 años y más ocupadas en trabajo doméstico remunerado, cifra que representa 4% del total de ocupados.

El trabajo doméstico es una ocupación predominantemente femenina: 1.9 millones de mujeres de 15 y más años ocupan 88% de los puestos de trabajo en esta actividad.

La ENOE 2021 estima que 96% de todas las personas ocupadas en el trabajo doméstico son trabajadores informales y 70% no tienen prestaciones laborales.

El trabajo doméstico consiste en actividades que se realizan dentro de los hogares y son necesarias para el bienestar de los integrantes.

Este tipo de trabajo puede ser no remunerado y/o remunerado; el primero de ellos se refiere al realizado para el mismo hogar del que forman parte los individuos sin que exista un pago, en tanto que el remunerado se realiza en el marco de una relación laboral, mediante un pago determinado, ya sea para el mismo hogar de residencia o para otro.

La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) 2021, estima que 84 millones de personas de 15 y más años realizan trabajo doméstico no remunerado para su hogar, en tanto que 2.2 millones de personas en el mismo rango de edad, están ocupadas en actividades de trabajo doméstico de forma remunerada. Esta cantidad representa 4% de los 53 millones de personas ocupadas en el país. 

Dentro del trabajo doméstico remunerado se incluyen las siguientes ocupaciones: empleados y cocineros domésticos; cuidadores de niños, personas ancianas o enfermas en casas particulares; jardineros, lavanderos y planchadores domésticos; choferes, vigilantes y porteros en casas particulares.

Otra característica del trabajo doméstico remunerado es que las diferentes actividades que lo componen están claramente diferenciadas según el sexo, pues mientras las mujeres se ocupan en actividades de limpieza y de orden, cuidado de personas, cocinar, lavar y planchar, entre los hombres predominan las actividades de jardinería, conducción de vehículos y vigilancia.

De acuerdo con la ENOE primer trimestre 2021, las personas ocupadas en el trabajo doméstico remunerado perciben ingresos mensuales promedio de 3 mil 300 pesos.

Los hombres (4 mil 200) obtienen en promedio mil pesos más que las mujeres (3 mil 200) ocupadas en el trabajo doméstico.

Esto se relaciona con que las ocupaciones donde predominan los hombres como la jardinería, vigilantes y choferes, tienen en promedio mayores ingresos mensuales.

En promedio, una persona que realiza trabajo doméstico remunerado trabaja 30 horas por semana. Los hombres (39 horas) trabajan en promedio diez horas más que las mujeres (29 horas).

Por tipo de ocupación las personas que fungen como choferes y vigilantes cumplen jornadas semanales más largas y en promedio trabajan 46 horas a la semana, en tanto que las personas empleadas domésticas son quienes menos horas en promedio trabajan a la semana con 28 horas.

La falta de acceso a prestaciones laborales es una característica de la informalidad del trabajo doméstico remunerado.

La ENOE, primer trimestre de 2021, muestra que 70% de las personas que realizan trabajo doméstico remunerado no cuentan con prestaciones laborales, 25% no tiene acceso a servicios de instituciones de salud pero tienen otras prestaciones, 4% tiene acceso a servicios de salud y otras prestaciones y 1% cuenta con acceso a servicios de salud.

Una característica del trabajo doméstico remunerado es que en su mayoría no ofrece la prestación de acceso a servicios de salud, acentuado en el caso de las labores donde predominan las mujeres ocupadas.

Únicamente 3% de las mujeres que realizan trabajo doméstico de forma remunerada, cuentan con acceso a servicios de salud como prestación laboral. Por su parte, 16% de los hombres declararon contar con acceso a servicios de salud como prestación laboral.

Otro aspecto que caracteriza la informalidad del trabajo doméstico remunerado es la falta de contrato formal de las personas ocupadas. Al primer trimestre de 2021, datos de la ENOE muestran que dos de cada 100 cuentan con contrato por escrito.

Esta situación esaún más presente en ocupaciones con mayoría femenina, como empleadas domésticas y cuidadoras de personas donde únicamente 1% tienen contrato por escrito, en tanto que las ocupaciones donde predominan los hombres tienen mayores porcentajes de personas ocupadas con contrato por escrito: 13% para jardineros y 16% para personal de vigilancia.