Ciudad de México.- La Secretaría de Salud Federal dio a conocer que en los dos meses y medio que han transcurrido del 2020, se han detectado 10 casos de sarampión en la Ciudad de México, identificados por el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica.
De ellos, siete casos residen en las alcaldías de Gustavo A. Madero, uno en Álvaro Obregón, otro en Coyoacán y uno más en Xochimilco.
La Secretaría de Salud reveló que los diez casos están asociados a una ausencia de vacunación y sus edades varían entre uno y 46 años de edad.
El caso más reciente se trata de una bebé de un año de edad, residente en la alcaldía Coyoacán, quien inició con la exantema el 2 de marzo y fue diagnosticada con sarampión el 6 de marzo.
El aviso epidemiológico destaca que la ocurrencia de brotes de sarampión en varias partes del mundo, principalmente en América y Europa, incrementa el riesgo de presencia de casos importados en México, tal como ha ocurrido con los 10 casos identificados en 2020.
Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) reitera que la única medida de prevención del sarampión es la vacunación, por lo que reiteró mantener una vigilancia epidemiológica enfocada a la detección y diagnóstico oportuno de casos probables.
El sistema de Vigilancia Epidemiológica no había observado un incremento de casos de sarampión desde 2006, cuando se contabilizaron 23, posteriormente se tuvieron cuatro años sin casos.
Posterior a ello se identificaron tres casos en 2011, cero en 2012, 2 en 2013, 1 en 2014, uno en 2015m cero en 2016 y 2017, cinco en 2018, 20 en 2019 y 10 en lo que va de 2020.
Desde el 1 de enero de 2019 al 24 de enero de 2020, en América Latina Brasil reúne el mayor número de casos confirmados de sarampión con 18 mil 73 y 15 defunciones, seguido de Estados Unidos con mil 282 casos, Venezuela 548 casos y Colombia con 242 casos y una defunción.
La OPS recodó que el sarampión puede causar neumonía, daño cerebral permanente, sordera, parto prematuro, bajo peso al nacer y muerte.
El sarampión se transmite cuando una persona infectada respira, tose o estornuda, y sus síntomas son fiebre alta, flujo nasal, tos, ojos rojos y erupción o sarpullido.
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