De la nada y sus epígrafes

Dislates 
Por: Salvador SILVA PADILLA

I

La semana pasada comenté sobre el libro La Edad de la Nada. El mundo después de la muerte de Dios. Ahora, para variar, comentaré sobre su inicio, es decir, los epígrafes.

Según una definición clásica,  el epígrafe de un libro es «la página reservada para la expresión, frase, sentencia o cita que sugiere algo del contenido del libro o lo que lo ha inspirado». Es como asomarse desde la calle a la ventana de una casa y desde ahí entrever qué es lo que sucede adentro. Así ocurre con los epígrafes: nos dan una idea general,  nos brindan una clave de lectura  de lo que tratará la obra.

Por ejemplo,  en el Mito de Sísifo, Albert Camus eligió:

“Oh, alma mía, no aspires a la vida inmortal, pero agota el campo de lo posible.”

Píndaro. III Pítica.

Y en Confabulario  Juan José Arreola seleccionó este epígrafe

“mudo espío,

mientras alguien voraz a mí me observa”

Carlos Pellicer

Pero de las obras que mayor número de epígrafes he leído  es, sin duda,   La Edad de la Nada. El mundo después de la muerte de Dios  de Peter Watson,  la cual nos  presenta en tres páginas, no uno, ni dos, sino ¡28 epígrafes! todos relacionados de manera relevante y significativa con  temas centrales del libro. En mi vida lectora yo no me había topado con un libro con tal cantidad de epígrafes.  Algunos son complementarios entre sí, y otros francamente contradictorios; no pocos pueden ser -de hecho, son- aforismos; pero todos, reitero,  se refieren al contenido del libro. Ofreciendo, cada uno, pistas -cual si fuéramos detectives- para desentrañar el misterio y encontrar al asesino.

Espero explicarlo mejor a través de la siguiente selección que hice (los clasifiqué por su tema, sin respetar el orden de aparición):

III

Sobre el sentido de la vida 

«Tenemos la sensación de que incluso en el caso de que se llegaran a responder todas las preguntas científicas posibles, los problemas de la vida seguirían totalmente intactos».

LUDWIG WITTGENSTEIN

«Los seres humanos no podrían soportar una vida carente de sentido».

CARL JUNG

«Debemos apostar por la existencia de un significado».
JAMES WOOD, parafraseando a GEORGE STEINER

«Es posible que la existencia carezca de sentido. Y sin embargo, la pasión de vivir es más fuerte que la explicación de la vida».

JOHN PATRICK DIGGINS

Sobre Dios 

«La religión está siendo sustituida por la terapia, de modo que “el Cristo salvador” se está convirtiendo en “el Cristo terapeuta”».

GEORGE CAREY, Obispo de Canterbury

«Si Dios no existe, todo está permitido».

FIODOR DOSTOIEVSKI

«Todas las religiones comparten un mismo lamento».

OLIVIER ROI

«Pero ¿hay realmente algo que ocupe el lugar que un día ocupara Dios?»

IRIS MURDOCH

«¡No se trata sólo de que no crea en Dios y de que, como es lógico, albergue la esperanza de que no exista! Es que no quiero que haya Dios; no quiero que el universo tenga ese carácter, como espero saber mostrar».

THOMAS NAGEL

Sobre la búsqueda de la felicidad

«La felicidad es algo que nos es dado imaginar, pero no experimentar».

LESZEK KOŁAKOWSKI

«Un ser humano no es alguien que vaya en pos de la felicidad, sino más bien una persona que busca una razón para ser feliz».

VIKTOR FRANKL

«El que tenga más juguetes al morir gana».

ESLOGAN MATERIALISTA

Y estos dos que son de mis favoritos:

«Hay otro mundo, pero está en éste».

PAUL ÉLUARD

«Estamos en el mundo para hacer el bien a nuestros semejantes. Lo que no sé es para qué están aquí esos semejantes nuestros».

WYSTAN HUGH AUDEN