Manzanillo.- Las especies que han resultado principalmente afectadas por la industrialización en la laguna de Cuyutlán en Manzanillo, han sido el camarón, la jaiba y el ostión admitieron dirigentes pesqueros de esta zona quienes señalaron que esta situación ha devastado mayormente la captura del camarón.
Entrevistada al respecto Carmela Velasco Chávez, dirigente de cooperativas pesqueras en este vaso lacustre, admitió que el vaso 2 de la laguna de Cuyutlán poco a poco va a desaparecer para los pescadores debido no sólo a la sobre explotación sino a la intensificación de la actividad industrial o portuaria; recordó que en esta zona se habilitarán varias hectáreas para construir el nuevo recinto fiscalizado.
Paralelamente citó que hoy día los pescadores tienen prohibido realizar su actividad en una franja de 200 metros a la redonda de la regasificadora, por lo que vaticinó que a este hábitat les sucederá lo mismo que en la zona de San Pedrito, antaño bastión del sector y que dejó de serlo tras la irrupción ahí de la actividad del comercio.
Por su parte Juan Campos, representante de este gremio, indicó que otras instancias también deben aportar más a la recuperación de este ecosistema entre ellas la termoeléctrica.
Explicó que la operación de este complejo implica la extracción de miles de metros cúbicos de agua de la laguna para enfriar sus turbinas, proceso que de paso se lleva a millones de larvas de camarón.
Indicó que esto último impide que dicho crustáceo se reproduzca a su nivel natural y aunado a la demanda de esta especie ha provocado que su captura sea hoy cosa del pasado en el vaso lacustre en mención.
Ante ello ambos sugirieron que la recuperación de esta no sólo se debe dar por el tema de la pesca sino además proporcionar otras alternativas para este sector entre ellos el ecoturismo, la acuacultura, la piscicultura.
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