Colima.- En el domo del Complejo Administrativo de Colima, ubicado a un costado del Hospital Regional Universitario, se pueden observar decenas de aves muertas.
La fundación Manantlán cree que quedaron atrapados entre el domo y una malla que fue colocada para que no ingresaran a esa estructura, y con ello evitar los olores fétidos por sus heces.
Sin embargo, la malla tiene orificios que permiten la entrada de las aves, y ahora están muriendo al quedar atrapadas.
Angélica Jiménez, presidenta de la Fundación Manantlán para la Biodiversidad de Occidente (Mabio), señala que en su última visita al Complejo, observó cerca de 50 aves muertas.
“Esa misma malla ahorita es como una trampa para las aves, en lo que pude caminar porque no me detuve bastante, me pareció algo horrible, pude contar cerca de 50 golondrinas muertas atrapadas en esa malla”.
Presencia de aves en el Complejo, problema antiguo
Angélica Jiménez recuerda que han sido varios los intentos del personal que labora en el Complejo por evitar el anidamiento de aves en el domo que genera olores fétidos.
El primero fue la instalación en el domo de cuatro figuras de búhos hechas a base de plástico que, en teoría, al ser un depredador natural de aves, serviría para ahuyentarlas. Sin embargo afirma que al no cambiar las figuras de lugar continuamente, las aves pudieron haber aprendido que no eran seres vivos y el método no dio resultado.
“Otra estrategia fue la colocación de bocinas que emiten vibraciones que suelen repeler a las aves pero tampoco funcionó para el Complejo Administrativo”.
En la última estrategia, la colocación de la malla, afirma que se ha vuelto un problema al provocar la muerte de los pájaros ya que este hecho puede traer otras plagas.
“Se quedan atoradas, mueren de hambre, se ahogan, y también se está ocasionando que después llegan otro tipo de insectos o bichos, llegarían a comerse las aves, tendrías un montón de gusanos, moscas y demás, entonces estás generando otra plaga en el recinto”.
Alternativas
La presidenta de Fundación Mabio señala que en muchos centros históricos del mundo utilizan un gel que es colocado en las estructuras, y logra repeler a las aves sin hacerles daño.
“Hay muchísimas marcas y precios, lo que se hace es colocar este gel que repele a las aves y no les afecta, cuando ellas quieren llegar a posarse es como si fuese un tipo de ácido, entonces las repele automáticamente, eso se está utilizando en otras ciudades para no tener ahí todos los cadáveres de las golondrinas”.
Otra opción, señala, sería tapar el domo con algún tipo de material resistente asegurándose de que no quede ningún tipo de orificio donde puedan anidar.
Advierte que de no tomar una alternativa, con el paso del tiempo llegará a haber cientos de aves muertas en el domo, y entonces se generaría un problema mayor.
“Se van a seguir atorando y van a seguir muriendo, aún así requieren sitios de anidamiento, hay que ayudarles a repeler ese sitio y que busquen otro a la redonda”.
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