Ciudad de México.- Este miércoles 14 de noviembre es el Día Mundial de la Diabetes 2018, enfermedad que representa uno de los problemas de salud pública más grandes en el mundo.
En 2015, 415 millones de personas tenían diabetes en el mundo y se estima que para 2040 se llegue a 642 millones, según datos de la Federación Internacional de Diabetes (FID).
Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán señaló que en México 12 millones de mexicanos padecen diabetes y se estima que para el 2045 sean 21.8 millones de mexicanos.
El 90 por ciento de los casos de diabetes en el país, se relacionan con sobrepeso y obesidad, indicó la Federación Mexicana de Diabetes.
El tema de este 2018 es “Familia y diabetes”, como el objetivo de tomar conciencia de las afectaciones que esta enfermedad puede tener en el contexto social, cultural y familiar.
Liliana Martínez Lomelí, Socióloga de la Alimentación, explica que el núcleo familiar es la unidad básica que en muchos casos, determina el éxito en la prevención de enfermedades crónico degenerativas.
Muchas variables relacionadas con el control de la diabetes están asentadas en las prácticas sociales, y por lo tanto en las familiares.
Las enfermedades crónico degenerativas son multicausales, pueden ser ocasionadas por genética o tener sus orígenes en el ambiente.
Se han englobado las causas ambientales en el término “estilo de vida”, que es la forma en la que el discurso médico se refiere generalmente a los componentes de alimentación, ejercicio y manejo del estrés.
La experta recordó que el estilo de vida tiene que ver con la manera en la que creamos nuestros hábitos cotidianos, por ello el núcleo familiar y la creación de hábitos son muy importantes.
Un hábito puede ser desde nuestro horario de sueño, hasta la hora en la que se consumen los alimentos.
Los hábitos se construyen socialmente, están normados a partir de lo que se ve en casa, con lo que crecimos, y son moldeados por nuestras experiencias posteriores de vida.
En el caso de las personas con diabetes, el apoyo de su núcleo familiar en el cuidado de su enfermedad resulta esencial en el éxito del control.
La paradoja, es que el cuidado de un miembro de la familia con diabetes en muchas ocasiones, resulta una carga emocional fuerte para todos los miembros de la familia que también debe ser atendida.
En este Día Mundial de la Diabetes, el tema familiar ayuda a reflexionar más allá de las enfermedades en relación a su costo para el Estado, o en sus causas y efectos para quien las padece.
La atención integral sobre el bienestar y la prevención, se deben centrar también en aspectos que tomen en cuenta factores sociales, culturales y psicológicos que propicien un mejor estilo de vida.
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