Ginebra.- Después de estar dos días seguidos como el tercer país con más fallecimientos por COVID-19, México descendió, hoy martes 15 de diciembre, a la posición número 10 con 251 muertes por esta causa, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En los primeros diez lugares se encuentran Estados Unidos con mil 434 muertes, Rusia 577, Alemania 500, Italia 491, Polonia 445, Francia 368, India 354, Brasil 279 e Irán 251.

Por otro lado, al observar el número de contagios nuevos en las últimas 24 horas, México se mantuvo en el décimo primer lugar con 8 mil 608 casos, por debajo de Estados Unidos, Turquía, Rusia, India, Brasil, Reino Unido, Alemania, Italia, Polonia y Colombia, quienes ostentan los primeros 10 lugares.

El conteo de acumulados desde el inicio de la pandemia, la OMS registra 71 millones 581 mil 532 casos y un millón 618 mil 374 muertes por COVID-19 en el mundo, siendo Estados Unidos el país con más víctimas, tanto infectadas como fallecidas.

OMS y juventud vs COVID-19

La OMS y la Fundación Pro Naciones Unidas echaron a andar una nueva movilización juvenil que tiene por objeto invertir en soluciones y actividades de participación encabezadas por los jóvenes para combatir la COVID-19, o multiplicarlas cuando ya estén implantadas.

La “Movilización Juvenil Mundial por una Generación Conmocionada”, será encabezada por seis organizaciones juveniles: Alianza Mundial de Asociaciones Cristianas de Jóvenes (YMCA), Asociación Cristiana Femenina Mundial (YWCA), Organización Mundial del Movimiento Scout, Asociación Mundial de las Guías Scouts, Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y el Premio Internacional Duque de Edimburgo.

En conjunto las organizaciones movilizarán activamente a más de 250 millones de jóvenes y tiene por objetivo ayudar a estos a idear actividades que giren en torno a los efectos de la pandemia y a participar en ellas.

La Movilización Juvenil Mundial presentará la convocatoria de una Cumbre Mundial de la Juventud para abril de 2021, así como un fondo de 5 millones de dólares estadounidenses destinado a respaldar a las entidades juveniles locales y nacionales.

“Para la OMS es un honor sumarse a esta apasionante y potente dinámica mundial encaminada a movilizar y capacitar a los jóvenes de todo el mundo para que se erijan en la fuerza motriz que nos ayude a recuperarnos de la COVID-19”, dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

Aunque en general los efectos sanitarios directos de la pandemia han sido menos graves en los jóvenes, sus repercusiones a largo plazo afectan a estos de forma desproporcionada.

Entre tales repercusiones están la desorganización de la enseñanza, la incertidumbre económica, la pérdida o falta de oportunidades laborales, los efectos en la salud física y mental o las traumatizantes consecuencias de la violencia doméstica.

Al mismo tiempo, los jóvenes también están impulsando cambios y aplicando soluciones en respuesta a la COVID-19, implicándose en labores de voluntariado e intervenciones de ámbito comunitario como el hecho de participar en las acciones de respuesta inicial para repartir alimentos y suministros a quienes los necesitan.

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